La filantropía en Venezuela: Una actividad en la que Chávez quiere exclusividad

La filantropía, la labor de asistencia y la responsabilidad social, parecen ser actividades que en Venezuela deben tener una sola impronta: la oficial… Al menos así parece creerlo en gobierno de Hugo Chávez.

Así lo refiere una información aparecida en el Washington Post, donde se da cuenta de que los programas sociales o “Misiones”, como los bautizó el propio presidente venezolano, tienen un alto rendimiento político que es preciso monopolizar y no dar oportunidad al sector privado y, menos aún, a la oposición, de obtener dividendos de la noble labor de ayudar al otro.
Además, estos programas sociales gubernamentales parecen haberse convertido en una excelente manera de ocultar el enorme gasto del gobierno, y el destino incierto de los inmensos ingresos petroleros que en los últimos trece años han alimentado las arcas venezolanas…. Las cuentas son un absoluto misterio.
Sin embargo, el sector privado no se amilana del todo, y pese a las trabas administrativas y de orden legislativo que desde las alturas del poder se imponen, iniciativas altamente loables se suscitan en el seno del empresariado. Tal es el caso de la Fundación Polar, brazo filantrópico de Empresas Polar, un grupo al que la administración de Chávez le ha declarado la guerra y amenaza constantemente con expropiar.
Tarea ciclópea… David contra Goliat… Donde el deseo de ayudar y el sentido de justicia social se imponen por encima del deseo egoísta de acaparar el rédito que la justicia y la generosidad otorgan.