Redacción Venezuela Política
El embajador venezolano en Cabo Verde designado por Nicolás Maduro, un no residente, anunció este lunes que se encuentra en el archipiélago para coordinar la defensa de Alex Saab, detenido por las autoridades de Cabo Verde a petición de Washington, quien lo considera un “líder” del régimen y testaferro de Nicolás Maduro, publicó el medio ATP.
En un comunicado, el embajador Alejandro Correa Ortega, residente en Senegal, dijo que había expresado a las autoridades de Cabo Verde “consternación” por el arresto de Alex Saab, el 12 de junio, durante una escala técnica en la isla de Sal, a quien describió como “enviado especial” de Venezuela. Saab es buscado por la justicia de los EE.UU. por ser un supuesto testaferro de Nicolás Maduro, a quien la Administración Trump junto a una coalición de más de 50 países no reconoce como Presidente legítimo.
Correa Ortega sostiene que el arresto, realizado por Interpol en conjunto con la policía de Cabo Verde, se hizo el día anterior a la emisión de una advertencia roja por parte de Interpol, para que se procediera a detención y posible extradición a solicitud de los Estados Unidos de América. Dijo que Alex Saab tiene nacionalidad colombiana y venezolana.
“Esta situación constituye una violación grave e inaceptable de las normas más fundamentales del derecho internacional: la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos de otro país”, escribe el embajador, quien anuncia que ha viajado a Cabo Verde para ocuparse de la dedena de Alex Saab, junto con un asesor legal especial y el equipo restante designado por Venezuela.
“Además de proporcionar apoyo consular al Enviado Especial, ayudaremos al equipo legal local a abordar los aspectos significativos del derecho internacional en esta detención ilegal”, enfatiza en la declaración, en la que pide la resolución “rápida” de la disputa por las autoridades de Cabo Verde. .
Alex Saab fue detenido en Cabo Verde sobre la base de una orden de arresto internacional emitida por los Estados Unidos por presuntos negocios ilícitos con Nicolás Maduro, después de haber estado presente en un juez del Tribunal Judicial de la Comarca do Sal para el primer interrogatorio judicial.
El Tribunal de Apelaciones de Barlavento en Cabo Verde “validó y ratificó” la detención preventiva de Alex Saab Morán, anunció el viernes la Procuraduría General de la República (PGR).
En una declaración, las autoridades locales explicaron que el empresario fue trasladado el 16 de junio a la isla de São Vicente, sede del Tribunal da Relação do Barlavento, el tribunal que tiene jurisdicción sobre la extradición.
“Presentado ante el Tribunal da Relação de Barlavento, el Honorable Juez Ponente validó y ratificó la decisión del Tribunal Judicial del Distrito de Sal, determinando el mantenimiento de la detención provisional del detenido, con el fin de esperar la solicitud de extradición al Estado solicitante” dijo el comunicado al respecto.
La ausencia de vuelos nacionales, suspendidos debido a la pandemia de COVID-19, obligó al Ministerio Público a presentar al sospechoso, dentro del período legal de 48 horas, ante el tribunal de Sal.
“Por lo tanto, el Estado requirente tiene un período de 18 días, que puede extenderse hasta un máximo de 40 días, para formular la solicitud de extradición, bajo pena de liberación del detenido”, recuerda la declaración de la autoridad competente.
El proceso de extradición, explica, también incluye una fase administrativa, con la intervención del Ministro de Justicia, y una fase judicial, cuya decisión recae en el Tribunal de Apelaciones, “que comienza después de la decisión favorable de la solicitud de extradición del funcionario gubernamental antes mencionado”.
El abogado caboverdiano del empresario Alex Saab Morán consideró este arresto como una “decisión política” y admitió apelar.
En declaraciones a la agencia Lusa, José Manuel Pinto Monteiro explicó anteriormente que está preparando las bases para la defensa del empresario, de nacionalidad colombiana y con pasaporte venezolano, criticando el arresto.
“Es un acto intencional del Estado [la detención], sabían lo que estaban haciendo y lo hicieron porque querían, no estaban obligados a hacerlo. Siempre pasa por una decisión política y es una decisión política”, acusó el abogado.
“Está claro que Cabo Verde eligió un bando”, agregó, refiriéndose a las diferencias políticas, económicas y diplomáticas entre el régimen de Maduro y el Gobierno de los Estados Unidos.
Alex Saab Morán es acusado por Estados Unidos de negocios corruptos con el régimen de Nicolás Maduro. El empresario fue arrestado cuando su avión hizo una parada para reabastecerse de combustible en el aeropuerto de la isla de Sal, en un vuelo de regreso a Irán, después de un viaje a Venezuela.
Al principio, como lo acusó el régimen de Maduro, la acusación estableció que Alex Saab Morán viajaba con un pasaporte diplomático, mientras denunció “posibles violaciones por parte de las autoridades de Cabo Verde a la Carta de las Naciones Unidas y la Constitución de la República”.
El régimen de Caracas denunció, en un comunicado, que el arresto de Alex Saab Morán fue “ilegal” porque estaba en una misión oficial con “inmunidad diplomática”. Las autoridades estadounidenses consideran que el empresario es un testaferro de Nicolás Maduro.
El arresto fue clasificado por la cancillería chavista como “arbitrario” y una “violación del derecho y las normas internacionales”, así como “acciones de agresión y asedio contra el pueblo venezolano, emprendidas por el Gobierno de los Estados Unidos de América”.
En la misma declaración de la Cancillería dirigida por Jorge Arreaza, se menciona que el colombiano Alex Saab Morán viajaba como “agente del Gobierno Bolivariano de Venezuela” y que estaba “en tránsito” en Cabo Verde, en una escala técnica necesaria para el viaje que estaba haciendo, cuyo objetivo era “garantizar alimentos para los Comités Locales de Supply and Production (CLAP), así como medicamentos, suministros médicos y otros bienes humanitarios para hacer frente a la pandemia de covid-19 “.
Saab había sido buscado por las autoridades estadounidenses durante varios años, sospechoso de acumular numerosos contratos, de origen considerado ilegal, con el régimen de Nicolás Maduro.