Falla del gasoducto que ocasionó apagón en Margarita se debió a una soldadura mal hecha y no a un “sabotaje”

Por Maibort Petit
@maibortpetit
El problema suscitado a raíz de una ruptura del Gasoducto de 36, ubicado en el sector La Pared, de la localidad de San Pedrito, municipio Sucre del Estado Sucre y que afectó la generación eléctrica en el estado Nueva Esparta, específicamente en los sistemas termoeléctricos “Juan Bautista Arismendi” y “Luisa Cáceres de Arismendi”, así como en Sucre la termoeléctrica “Antonio José de Sucre” y “Juan M Valdés”, supuestamente sería la consecuencia de un mal procedimiento en la construcción del mismo, además de la falta de mantenimiento de que es objeto por parte dela Corporación Eléctrica Nacional, Corpoelec.

Así nos los dio a conocer una fuente interna bien informada en el asunto, quien hizo la declaración bajo la condición de anonimato. Este informante nos aseguró el problema surgió por una soldadura que hubo de hacerse ante un mal procedimiento que tuvo lugar durante la construcción.

Aseveró que un gasoducto no debe fallar de la forma en que lo hizo el causante del apagón neoespartano, a tan poco tiempo —5 años— de su puesta en servicio. “Esta soldadura (y otras mas) salió a relucir en las radiografías y pruebas hidrostáticas, cuando se le entregó la obra a Operaciones”, dijo. 

De hecho, pudimos conocer que el ingeniero inspector, encargado de revisar la obra, no quería aprobar los tramos donde las soldaduras tenían fallas.

Para ese momento, quien fungía como Gerente General del Proyecto, Daniel Chirinos, fue promovido a Director de Operaciones y el Gerente General pasó a ser Elpidio Araque. Ambos habrían sacado del área de inspecciones al ingeniero que se había negado a aprobar los trabajos y a quien identifica como Rubén García, y procedieron a cambiar de radiografía a ultrasonido como método de revisión de las soldaduras y así justificar la aprobación.

Los documentos muestran que el Gerente General del Proyecto y director de Operaciones de esa época era Daniel Chirinos; el gerente General era Elpidio Araque; mientras que el ingeniero inspector era Rubén García, quien fue reubicado en un cargo administrativo.

Esta información viene a corroborar lo afirmado por la Comisión de Energía Eléctrica del Colegio de Ingenieros del estado Nueva Esparta, que emitió opinión sobre falla que afectó el gasoducto de las plantas “Luisa Cáceres” y “Juan Bautista Arismendi”.

Los reportes de prensa dicen que un 50 por ciento de los sectores de la isla habían reportado por alguna vía —incluyendo las redes sociales— la suspensión del servicio y, en otros casos, caídas de una fase de energía. 

Eustacio Aguilera, presidente de la citada comisión, dijo que si se mantuviera el sistema dual de gas y diésel, cualquier eventualidad sería rápidamente superada.  

Corpoelec anunció un nuevo plan de racionamiento de, al menos, 6 horas cada día en cada ciclo.

El suministro en Margarita es 60 por ciento por el cable submarino y 40 por ciento a través del gasoducto, pero siempre con dependencia del sistema de interconexión.

Motta vuelve a decir que es saboteo 

El ministro para la Energía Eléctrica, Luis Motta Domínguez, denunció el sábado que la explosión que se registró en un segmento del Gasoducto Nororiental “José Francisco Bermúdez” que, como ya dijimos, ocasionó las interrupciones en el servicio eléctrico en Nueva Esparta, se debió a un acto de terrorismo y sabotaje.

Motta Domínguez aseguró que el supuesto saboteo tuvo lugar en un segmento del gasoducto de Petróleos de Venezuela S.-A. (PDVSA).

Según la versión de Motta Domínguez, ofrecida durante una entrevista trasmitida por Venezolana de Televisión, el evento fue producto del bote de gas, por lo que la estatal petrolera se vio obligada a cerrar los extremos de las válvulas.

Aseguró el funcionario que en estos momentos no hay gas para que puedan operar las plantas termoeléctricas que surten a la Isla de Margarita, porque las que abastecen a Coche funcionan con diésel.

Finalmente, Motta dijo además que Pdvsa está trabajando arduamente en la reparación de la avería para restituir el gas en la zona.