Excandidato presidencial de Guatemala fue condenado a 15 años de cárcel por delitos de narcotráfico en EE. UU.

   Estrada fue acusado por el gobierno de Estados Unidos de haber prometido a un supuesto representante del cártel de Sinaloa que sí le pagaban la campaña presidencial podrían designar a los ministros de la Defensa y de Interiores para proteger las actividades de narcotráfico en Guatemala.

 
Por Maibort Petit
@maibortpetit
   Un juez de Nueva York condenó a 15 años de cárcel a quien fuera candidato presidencial de Guatemala, Mario Amilcar Estrada Orellana, luego de haberse declarado culpable de intentar solicitar financiamiento de su campaña electoral a los carteles de la droga a cambio del apoyo de su futuro “Gobierno” para los envíos de cocaína a los EE. UU.
   Mario Amilcar Estrada Orellana y su asociado, Juan Pablo González Mayorga fueron acusados de conspirar para importar cocaína a los Estados Unidos y por posesión y uso de ametralladoras.
 
  Estrada y González fueron arrestados el 17 de abril de 2019 en Miami, Florida. Luego de un largo proceso de negociación, Estrada se declaró culpable en el mes de octubre de 2019 y fue condenado este martes en la Corte del Distrito Sur de Nueva York.
 
   Estrada fue sentenciado a 180 meses de cárcel (15 años), 4 años de libertad condicional y a pagar una multa de dinero de USD. 40 mil. El excandidato presidencial guatemalteco pagará su condena en una prisión federal en el estado de la Florida.
 
    Estrada fue acusado de solicitar dinero del Cártel de Sinaloa para financiar un plan corrupto para elegirse presidente de Guatemala. A cambio, supuestamente prometió (junto al otro conspirador) ayudar al cartel a usar los puertos y aeropuertos guatemaltecos para exportar toneladas de cocaína a los Estados Unidos. 
 
  En la acusación federal se alegaba que Estrada y González intentaron concretar los asesinatos de sus rivales políticos. Cuando Estrada se declaró culpable en octubre de 2019, negoció con la fiscalía este cargo que podría haber agravado su condena a más años de prisión.
 

Los cargos de este caso

 
   Desde alrededor de diciembre de 2018, la DEA investigó  a varias personas que intentaron solicitar fondos a los cárteles internacionales de la droga para apoyar la campaña presidencial de Estrada. Durante algunas de estas negociaciones, miembros de la operación conocida como la “Conspiración de Estrada”, entre ellos el mismo Estrada y González, interactuaron con supuestos miembros y asociados del Cártel de Sinaloa, una poderosa organización internacional de narcotráfico con sede en México, que de hecho eran fuentes confidenciales que actuaban bajo la dirección de la DEA.
 
 
 
  Durante el curso de estas reuniones y otras comunicaciones, algunas de las cuales fueron grabadas en video y audio, Estrada y González solicitaron millones de dólares en ingresos por drogas del Cártel de Sinaloa para apoyar la Campaña Estrada. A cambio del apoyo financiero del Cártel de Sinaloa, Estrada y González  acordaron que si Estrada era elegido presidente de Guatemala, brindaría apoyo patrocinado por el Estado de Guatemala a las actividades de tráfico de drogas del Cártel de Sinaloa.
 
   Entre otras cosas, los dos acusados acordaron proporcionar al Cártel de Sinaloa un acceso sin restricciones a los aeropuertos guatemaltecos y a los lugares de envío marítimo para que el cartel pudiera transportar toneladas de cocaína a través de Guatemala, a los Estados Unidos.
 
   Estrada y González también ordenaron a los cooperantes de la DEA que contrataran sicarios para asesinar a sus rivales políticos para garantizar que Estrada fuera elegido presidente de Guatemala. En particular, los dos acusados identificaron objetivos específicos por sus nombres y acordaron proporcionar armas de fuego a los sicarios, incluidos los AK-47, para llevar a cabo los asesinatos.
 
  El acusado fue candidato presidencial en Guatemala para las elecciones que se realizarán en junio de 2019.
 
   Dice que los cooperantes de la DEA se reunieron con González el 6 de enero de 2019 en ciudad de Guatemala, donde este le explicó que era miembro del partido (1) en Guatemala y que Estrada era el candidato, y que para ser competitivo en las elecciones necesitaba que los carteles les financiaran las campañas. Le pregunto al CS1 si conocía a los grupos que estuvieran interesados y que si ganaba varias agencias del gobierno apoyarían las actividades de narcotráfico. Inclusive le dijo que el cartel que financiara podría nominar el ministro del interior que es el órgano del gobierno que se encarga de designar la policía y el de la Defensa que son los militares.
 
  El agente encubierto de la DEA preguntó a Estrada y a González que si el cartel financiaba la campaña querían tener acceso al gobierno, a lo que los acusados respondieron que si el cártel de Sinaloa lo hacía entonces podrían nombrar a los ministros del Interior y defensa que son los que controlan los aeropuertos y puertos de Guatemala, para lo cual tenían que entregar una lista de tres de los cuales Estrada escogería a uno.
 
   El CS1 le dijo a Estrada y a González que el CS2 representaba a uno de los líderes del cártel de Sinaloa, Ismael “el Mayo” Zambada, y que este estaba interesado en financiar a la campaña a cambio del apoyo del gobierno de Guatemala a las actividades del cártel.
 
  Estrada solicitó entre 10 a 12 millones de dólares, porque necesitaba enviar un monto de dinero considerable a los 22 distritos de Guatemala para poder ganar los votos en cada distrito. También planeaba pagar dos millones de dólares a un individuo para que hiciera la campaña on line.
 
   El CS1 le dijo que el cártel de Sinaloa iba a enviar un cargamento de USD 30 millones en cocaína para enviarla a Nueva York y que USD 15 millones provenientes de la venta de la droga iban a ser entregados a Estrada en Guatemala.
 
  El cooperante 2 de la DEA propuso enviar 6 aviones cargados de cocaína a Guatemala mensuales y que cada aeronave iba a cargar varias toneladas de cocaína, de los cuales le darían a Estrada el 10 por ciento de cada tonelada. En total, Estrada recibiría un pago por aproximadamente entre 40 y 50 toneladas de cocaína. Estrada habría acordado hacer la negociación, dice la demanda. 
 
 
   El cooperante de la DEA también le dijo que la droga con la que iba a ser financiada su campaña  iba a ser enviada a Nueva York, y de la cual recibiría USD 5 millones de dólares en un futuro muy corto.
 
   El 14 de febrero de 2019, González se reunió con el CS2 y un agente encubierto en una bodega en Florida. Allí acordaron contratar a un sicario para que matara a los rivales políticos de Estrada.  En una reunión posterior, el entonces candidato le dijo al cooperante de la DEA que no era necesario proceder con los asesinatos porque otra persona iba a matar al target.
 
   El 4 de  marzo de 2019 Estrada, González, CS1 y CS2 se reunieron en la ciudad de Guatemala. En ese encuentro, Estrada le dijo que necesitaba con urgencia que el cártel de Sinaloa le pagara los gastos de la campaña. Discutieron cómo llevar el dinero y Estrada propuso que fuera a través de un Yate UC con la ruta Miami-Cuba- Guatemala. CS1 le dijo que un yate llamaría la atención de las autoridades, pero Estrada le aclaró que si tenía bandera americana y era manejada por ciudadanos estadounidenses. Igual el acusado dijo que que era más fácil comprar un yate que pagar el transporte que se había discutido.
 
   En una reunión ocurrida el 5 de marzo, el CS1 propuso que había una persona que podía mover USD 500.000 por semana por una comisión del 12 por ciento, pero Estrada respondió que él ya había conseguido alguien que le llevara el dinero desde Miami e instruyó a CS1 para que le dijera a su fuente que enviara USD 2 millones que iban a transportar.
 
   En otras reuniones Estrada aseguró tener los arreglos hechos para que le trajeran el dinero de Miami a Guatemala, y que sería él mismo el que se encargaría de manejar el dinero de su campaña y que además había escuchado que gente del cártel Jalisco Nueva Generación estaban interesados en financiar también su campaña.
 
  El 11 de abril de 2019, el CS1 contactó a González desde Manhattan, para informarle que tenía el dinero de la campaña y le preguntó si podía viajar a Miami para recoger el dinero. El hombre acudió a la cita y fue entonces cuando fue arrestado por las autoridades norteamericanas.